La linaza, semilla de la planta de lino, es considerada un alimento funcional ya que aporta una gran cantidad de nutrientes muy importantes para el organismo. Posee lignanos, sustancias polifenólicas antioxidantes que ayudan a combatir los efectos de los dañinos radicales libres, por lo que se relacionan con una potencial actividad anti cancerígena.
Los principales beneficios de la semilla de linaza están relacionados con su alto contenido de ácidos grasos esenciales, que la convierten en un buen complemento nutricional para nuestra alimentación habitual.
Es rica en fibra dietética, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades como la diabetes, obesidad o hipertensión. Además, las semillas de lino, tanto enteras como molidas, contribuyen a promover el tránsito intestinal.
La linaza es una buena fuente de proteína vegetal, componente funcional y estructural principal de cada célula del cuerpo, lo que puede considerarse como una buena alternativa también para las personas que llevan una dieta vegetariana.
Esta semilla es también una excelente fuente de minerales como el magnesio y manganeso. Ambos son componentes que contribuyen de manera importante en el desarrollo de los huesos
El ácido alfa-linolénico (ALA) es el ácido graso principal de los comúnmente conocidos como omega-3, que constituye un 55% del contenido total de la grasa en la linaza. Es un ácido graso esencial al que se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y la reducción del colesterol, entre otras. El contenido de omega-3 ALA en la linaza también puede tener beneficios cardiovasculares.
Inclúyela en pequeñas cantidades en tu alimentación diaria. Recuerda que siempre es importante llevar una dieta equilibrada que contenga todos los grupos de alimentos. Estos son sólo algunos ejemplos de cómo preparar la linaza y consumirla:
La linaza molida se puede agregar en diferentes preparaciones, como jugos de frutas o en una taza con frutas picadas. Si quieres aprovechar al máximo los nutrientes de la semilla, puedes molerla en tu casa y usarla a corto plazo.
- Es muy fácil, solo debes agregar una cucharada de linaza molida en un vaso de agua al día y beber para disfrutar de sus beneficios. También puedes preparar tus infusiones o tés agregando una cucharada de semillas de esta planta por cada vaso de agua, dejando remojar unos minutos antes de beber.